El último trabajo dado a conocer por la Fundación Sol demuestra el paupérrimo nivel salarial de los asalariados chilenos, lo que explica los altos niveles de endeudamiento familiar.
Los trabajadores(as) chilenos ganan un moco. Suena horrible, pero la realidad laboral chilena es horrible. Y lo intuíamos, pero faltaban los datos. Y gracias a los datos que proporcionó la última Encuesta de Caracterización Socioeconómica, y fundamentalmente a un trabajo realizado por la Fundación Sol denominado «Los Bajos Salarios de Chile: Análisis de la encuesta Casen 2017», tenemos la certeza absoluta de que más de la mitad de las personas (54,3%) que trabajan en Chile lo hacen por menos de 350 mil pesos líquidos. Es decir, apenas 49 mil pesos más que el sueldo mínimo.
Es decir, si bien el promedio de los salarios es casi 517 mil pesos, si analizamos los datos para determinar la mediana (que es el umbral máximo que alcanza la mitad de los trabajadores), la cifra se reduce en un tercio (350 mil).
Esto es consecuencia de una legislación favorable al empresariado que impide una distribución más criteriosa del producto, así como de los bajos niveles de innovación y productividad empresarial, lo que le resta valor a la matriz productiva del país. Del mismo modo, estas magras cifras se comporta como uno de los factores de base que explican las miserables pensiones que pagan las AFP. Otra cifra inquietante es que el 74,3% de los trabajadores gana menos de $500.000 líquidos al mes y sólo el 16,1% gana más de $700.000.
Esto redunda en los crecientes niveles de endeudamiento familiar observados en Chile, donde el costo de la vida es de los más altos del continente. «Significa que un trabajador no podría sacar de la pobreza a una familia promedio de cuatro personas, aun cuando trabaje la jornada completa», dice uno de los economistas encargado del estudio, Marco Kremerman, toda vez que en 2017 se fijó el ingreso familiar mínimo en $418.228.
El análisis refrenda una brecha por género, pero esta brecha se expresa territorialmente. En siete regiones del país (Coquimbo, Libertador, Maule, Ñuble, Araucanía, Los Ríos y Los Lagos) el 70% de los trabajadores gana menos de 400 mil pesos, mientras que en Antofagasta el 50% gana menos de 450 mil.