Todo parece indicar que seguiremos viendo de lejos cómo las grandes compañías mineras extranjeras se enriquecen aún más con la inveterada costumbre de llevarse a saco los recursos mineros de Chile. La razón: la institucionalidad está montada para que paguen la menor cantidad posible de impuestos y regalías. ¿Y Codelco? Da lo mismo: La Concertación y la derecha han hecho todo lo posible por hacerla deficitaria e ineficiente a efectos de concretar su privatización.
Los empresarios mineros se frotan las manos con el alza del valor del cobre, el principal producto de exportación de Chile, cuya libra está siendo transada por sobre los 4 dólares en la Bolsa de Metales de Londres. Algunos hablan de un nuevo “súper ciclo”. ¿Significa que chilenas y chilenos estaremos mejor? Quienes son partidarios de recuperar la riqueza minera para Chile, creen que no. En realidad, este nuevo boom no dejará mucho en las arcas fiscales si “Codelco deja unos excedentes de 2.500 millones de dólares, y no los 9 mil millones que debería dejar”, dice Julián Alcayaga, abogado y economista integrante de la Fundación Chile Cobre.
“Hay un saqueo tan grande en la cuprífera estatal que los excedentes serán menores a los que en justicia debería dejar, y lo que es peor: dejará la vara muy bajita para la minería privada, que verá estos excedentes y decidirá tributar unos 3 mil millones de dólares, y no los 15 mil millones que debería dejar“, agregó.
“Un 30% de lo que exporta Codelco es concentrado de cobre, y tiene un menor contenido metálico que lo que exportan las compañías extranjeras que se llevan el recurso. Incluso los pequeños mineros le venden a la Sonami (Sociedad nacional de Minería) concentrados con un contenido metálico que supera el 35% o el 40%. ¿Cómo se explica esto en circunstancias que Codelco cuenta con la mejor tecnología de concentración?“, se preguntó más tarde.
El punto es que ya casi da lo mismo que aumente la cotización del metal rojo. “En 2011 empezó el súper ciclo anterior del commoditie y resulta que aportó en excedentes algo así como 2.000 millones de dólares menos que en 2006, cuando el cobre estaba a 3 dólares“, señaló. Tampoco pasará gran cosa con la minería privada, recordó Alcayaga, “ya que la Concertación les permitió tributar ya no según las ventas, sino según las utilidades. ¿Y qué hicieron? Declarar pérdidas mediante triquiñuelas. Muchas mineras no tributan”, precisó.
“¿Qué pasó ahí? Por aquellos años empezó el saqueo y la destrucción de Codelco, cuando Michelle Bachelet cambió la ley de gobierno corporativo de la empresa y el presidente del directorio de la compañía estatal dejó de ser nombrado por el Presidente de la República y pasó a ser nominado por los que integran el directorio bajo el procedimiento establecido por la Alta Dirección Pública, cuya normativa exige que el nuevo presidente debe provenir de la industria. Lo que ocurrió es que llegaron los ejecutivos de las compañías privadas, y estas compañías sólo persiguen destruir a Codelco y lograr su privatización. Llegaron Diego Hernández, Thomas Keller, Nelson Pizarro y otros personajes que han endeudado a Codelco sin necesidad de hacerlo”, añadió.
Respecto a las condiciones objetivas que hacen posible todas las formas de saqueo a gran escala que sufre el país, Alcayaga sostuvo que “el Servicio Nacional de Aduanas no fiscaliza, dice no tener los medios para fiscalizar todo lo que sale ni para controlar la exportación de concentrados. Por eso es que contrata a empresas privadas externas que se encargan de precisar lo que sale del país. Es imposible pesar un barco, así que se procede a un cálculo muy complejo que incluye variables como el contenido que sube por la correa transportadora, se sacan muestras para determinar el contenido, etc… el problema es que ese trabajo lo hacen empresas privadas que también trabajan para las mineras privadas, y algunas incluso son filiales de las mineras privadas“, añadió.
Junto con fortalecer el trabajo fiscalizador de Aduanas, Alcayaga insistió en la necesidad de establecer un royalty indexado al aumento en la cotización del metal rojo, “es decir, el royalty salta del 5% al 10% si cotiza en 2 dólares la libra, y a un 20% si lo hace en 3 dólares, y a un 30% si pasa a 4 dólares la libra, y así sucesivamente de manera proporcional. Yo soy partidario de nacionalizar toda la minería, pero si no hay voluntad política para una acción que exige arrojo y decisión, entonces vamos con este plan B. Entiendo que ahora hay parlamentarios que están proponiendo esta idea que vengo planteando hace mucho rato”, indicó el abogado y economista.